Marta
Alli estaba marta,
sentada en su patio
fumándose un cigarrillo
de nuevo enamorada
disfrutando de la desnudez sobria
de sus pensamientos;
odiaba las cosas elementales
aunque luego se contradijera
Escucha a janis mientras saborea
lo último de su copa de vino
detestaba exhaustivamente la gente
que se arrepiente,
le encantaban los largos silencios
y el whisky con hielo
un día como cualquiera,
su amante no volvió.
aun recuerda el olor penetrante de su aliento
Y la figura acoplada de su pecho,
ha pensado determinante mente obviar
el extremo frio de sus sabanas
talvez regresa a casa…
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